viernes, 21 de septiembre de 2012

CÓMO HACER UNA ANACRÓNICA

Muchas veces he visto cursos y libros para escribir bien. Todo tiene que ver con encajar experiencias personales en el esquema aristotélico de la Poética (Planteamiento, nudo y desenlace + mi vida). Aunque nunca haya negado la efectividad de este esquema, tampoco me parece lo que dignifica realmente a un buen escritor. Con el esquema aristotélico, la historia funciona sencillamente. Y escribir sobre experiencias personales sin más es igual que plagiarle un relato a la vida misma. Una buena historia requiere creatividad. Escribir los hechos tal y como sucedieron siempre me pareció un tema más asociado al periodismo que a la literatura. Afortunadamente, encontré la mejor manera de combinarlos. La anacrónica.

Para los que hayan leído mi blog desde el principio, ya saben más o menos cómo funciona. La anacrónica lleva los mismos preparativos que una crónica periodística. Se elige un tema, se documenta sobre el mismo, se cubre y se escribe. Pero, en esto último, se emplea un lenguaje simbólico-literario. Con lo cual se personaliza y el anacronista participa en la historia que relata. A la misma vez, me percaté que seguían apareciendo vertientes y estilos particulares de anacrónicas. A lo largo de la entrada, explicaré cada modalidad y cómo realizarla. Hasta ahora he descubierto cuatro: la anacrónica natural, la anacrónica generativa, la anacrónica gris y la anacrónica legendaria.



La Anacrónica Natural. En cierta manera, es la más sencilla. Puesto que no hay que documentarse ni buscar un tema en particular. Es el típico caso de cuando la realidad supera la ficción. La propia vida plantea una serie de circunstancias que enlazan una historia. Algo así como el Gonzo Periodismo de Hunter S. Thompson. Y la película Fear and Loathing in Las Vegas para aquellos que desconozcan el autor. El periodista cubre una historia y desemboca en otra. O bien, un escritor que no busca nada en particular y una historia se presenta ante sus ojos. Aquí entra lo más importante de cualquier anacrónica: la caza de simbolismos. Me ha pasado muchas veces a lo largo de mi vida. Una historia que aparece de repente y se desarrolla por sí misma. Uno sólo debe llevar el hilo y unirla. Lo ideal en la anacrónica natural es cazar el primer simbolismo. Es el que deriva el tema de nuestra historia. En lo personal, me pasó en Grecia. Se me presentó el simbolismo que era el dios del Tiempo y nadie me recordaba. El primer simbolismo sucedió en el avión con la indigestión psicosomática de visitar un país que no conocía. Lo interpreté como el castigo de un dios que se comió a sus propios hijos. Los simbolismos posteriores fueron apareciendo enseguida. En cuanto identificamos el primero, se debe procesar según la siguiente fórmula:

SIMBOLISMO INICIAL + SIGNIFICADO = TEMA

TEMA  + (EXPERIENCIAS x SIMBOLISMOS SUBSIGUIENTES)  = HISTORIA

TEMA + SIMBOLISMO FINAL = SENTIDO

HISTORIA + SENTIDO = ANACRÓNICA NATURAL

No es que se requiera un esquema matemático para hacer una anacrónica. Pero es más fácil verlo de esta manera a la hora de realizarlas. Lo explico. Desde que aparece el simbolismo inicial, le damos un significado. El Tema de la anacrónica. Sujeto a este tema y por la propia dialéctica de la vida, nos surgen experiencias. Muchas de ellas sin sentido alguno o que no tienen relación con el tema. Ergo sólo valen aquellas con simbolismos subsiguientes o similares. Esto nos da la historia. Dado que los simbolismos subsiguientes son una variable multiplicada por la experiencia vivida, la cantidad de simbolismos en una anacrónica puede ser ilimitada. Por tanto, es obra creativa del anacronista unificar el tema con el simbolismo final para dar lugar al sentido de todos los simbolismos enlazados. Y sumado a la propia historia, la anacrónica natural.

Ejemplos y enlaces de la Anacrónica Natural:  

La Anacrónica Generativa. Esta es una modalidad más complicada puesto que se va con el tema premeditado y se busca enlazar los simbolismos en acorde a una zona designada. Que, contrario a la anacrónica natural, pueden aparecer o no. Concretamente, el simbolismo final que enlaza todos. La anacrónica generativa requiere una documentación extensa sobre el tema elegido. Sencillamente para que el proceso de la caza de simbolismos sea vasto. Mientras más documentado se está, más simbolismos puede uno descubrir en los alrededores. Por esto mismo, la anacrónica generativa tiene que cubrir hecho sujetos a la realidad material y, específicamente, la zona, el país y la cultura que se circunscribe al espacio. Por lo que el tema debe ser anexo a la misma. La fórmula en este caso sería así:

TEMA DESIGNADO + ZONA DESIGNADA =  PREMISA GENERATIVA

PREMISA GENERATIVA + (EXPERIENCIAS x SIMBOLISMOS SUBSIGUIENTES) = HISTORIA

PREMISA GENERATIVA + SIMBOLISMO FINAL = SENTIDO

HISTORIA + SENTIDO = ANACRÓNICA GENERATIVA

Contrario a la anterior, el tema y la zona se designan previamente por el anacronista. Por ejemplo, el calendario maya y Tikal. Esto nos da una premisa generativa de carácter activo, o mismamente empírico o experimentado, para desarrollar los simbolismos subsiguientes en una historia. Como he dicho antes, el problema en este caso es que el simbolismo final puede no aparecer. Y es necesario para proceder el desenlace del sentido y la anacrónica generativa propiamente.


La Anacrónica Gris. Me he guardado una parte fundamental de las anacrónicas para este apartado en vistas que es la modalidad con mayor desarrollo sobre el mismo. Mientras se pasa por la dialéctica de simbolismos, el anacronista tiene que dejarse llevar por la historia. En otras palabras, tiene que respetar más lo que está pasando que sus propias convicciones. Cosa que implica que debe moldearse y cambiar de identidad en ocasiones. Igual que haría un actor camaleónico. Esto puede estar incluido en el tema, la zona o la premisa. Y es aplicable tanto a la anacrónica natural como a la anacrónica generativa. De ahí el híbrido que denomino la anacrónica gris. El término "gris" no es sólo porque mezcla aspectos de ambas modalidades sino por el simbolismo final que surgió en la primera serie que hice (ver enlace de abajo). Pero esta anacrónica se distingue particularmente por un pequeño detalle. La fórmula quedaría así:

TEMA ELEGIDO + ZONA DESIGNADA =  PREMISA NATURAL

PREMISA NATURAL + (EXPERIENCIAS x SIMBOLISMOS SUBSIGUIENTES) = HISTORIA

PREMISA NATURAL + SIMBOLISMO FINAL = SENTIDO

HISTORIA + SENTIDO = ANACRÓNICA GRIS

El Tema se elige de antemano pero no tiene que ver con la zona designada. Contrario a la anacrónica generativa donde deben tener correlación. La premisa se somete, por tanto, a la dialéctica de una anacrónica natural. Reitero que esta modalidad requiere un don camaleónico y un conocimiento extenso sobre el tema para que funcione bien. Además de ser la más peligrosa. Yo casi acabo loco… casi. 

Ejemplos y enlaces de la Anacrónica Gris: 

La Paradoja Flashpoint Umbría
Veinticuatro Horas Después de Cristo
Las Noches Más Oscuras de Marrakech (última entrada con enlaces a las 7 anteriores)  



La Anacrónica Legendaria. Esta es la última vertiente que he desarrollado. Normalmente es un comodín para una anacrónica generativa fracasada o, dicho de otra manera, aquella cuya historia real no tiene los simbolismos suficientes o se quedan cortos a la hora de narrarlos periodísticamente. Con lo cual, utilizamos más recursos literarios para maquillar la historia. Es decir, contamos la historia desde una base ficticia; opuesto a la anacrónica generativa cuya base es la realidad. También es aplicable a la anacrónica gris, pero como ésta es híbrida, incorpora estos elementos de la misma manera que fusiona la natural y la generativa. En este punto, la anacrónica legendaria no se utiliza necesariamente para la ausencia de simbolismos. Podemos hacer una anacrónica de este tipo independientemente del éxito o fracaso de la anacrónica generativa. Debemos estudiar los simbolismos documentados y ver si es mejor contarla desde una perspectiva real o ficticia. Tampoco es tan sencillo como parece. Para que la anacrónica legendaria funcione bien, debe sustituir la mayor parte de elementos reales por ficticios a la vez que permanece fiel a los hechos que debe enlazar. El formato estándar es el de usar fotografías y un pie de foto extenso que enlanza los hechos de las mismas mediante una historia fantástica. El nombre del anacronista como los lugares que narra suelen ser sustituidos por personajes o mundos irreales. Por tanto, es la anacrónica que mayor creatividad requiere. El esquema sería el siguiente:

TEMA DESIGNADO/ELEGIDO + ZONA DESIGNADA =  PREMISA LEGENDARIA

PREMISA LEGENDARIA + (EXPERIENCIAS FICCIONADAS + HECHOS/FOTOS x SIMBOLISMOS SUBSIGUIENTES) = HISTORIA

PREMISA LEGENDARIA + SIMBOLISMO FINAL = SENTIDO

HISTORIA + SENTIDO = ANACRÓNICA LEGENDARIA

Ejemplos y enlaces de la Anacrónica Legendaria:  

El Camino de la Fuerza 

viernes, 14 de septiembre de 2012

MANUAL DEL AVENTURERO

A menudo soñaba con meterme en aventuras. Estilo Indiana Jones. Buscando tesoros, pasando por civilizaciones antiguas y escapando de sus trampas y aborígenes. En la realidad, la aventura no llega a ser como Hollywood. Si hay que hacer una referencia histórica de un aventurero real, tendría que ser Giacomo Casanova. Se le conoce como el mejor amante de todos los tiempos. Aunque mucha gente desconoce su parte aventurera. Descrita en sus Memorias autobiográficas en francés, Historie de ma vie (Historia de mi vida). Aparte de sus numerosos amoríos, se narran sus experiencias como filósofo, erudito, masón, espía,  diplomático, despilfarrador, viajero e inclusive como fugitivo tras escapar de la prisión veneciana de Los Plomos. De mi propia experiencia alrededor del mundo, he encontrado pautas concretas que conducen a situaciones aventurescas. La ley principal de cualquier aventura es la innovación a partir de una carencia.




No tener un plan. Al viajar, mucha gente contrata guías turísticas de agencias para conducirlos por un terreno que desconocen. Dejo claro que el turismo y la aventura son inversamente proporcionales. Siempre que haya algo programado, se sabe el desenlace. Y en la aventura, nunca se sabe el desenlace. Si quieres descansar y relajarte, es adecuado contratar a un guía. Pero si es aventura lo que buscas, uno debe ser autodidacta o bien conocer a un guía coloquial que te lleve detrás de las escenas. ¿Qué es un guía coloquial? Pues aquel que no trabaja para ninguna agencia. Me pasó cuando viajé a Salamanca a cubrir la Nueva Catedral. Coincidió con un puente y no encontré ninguna habitación en toda la ciudad. Claramente no llevaba un plan. Acabé conociendo a un salamantino en un bar que me llevó detrás del telón hasta el siguiente día por sitios que nunca hubiera recorrido.   

Hostales sobre hoteles. Mientras más acomodado estás, menos aventuras tendrás. La máxima de la incomodidad. En los hoteles hay veces que se opta por ver películas y beber botellas del mini bar sin salir de la habitación. Hasta si bajas a un punto de encuentro social en el lobby, la gente suele estar encasillada en sus propios planes. Los hostales son más propensos a la interacción. Sobre todo los Youth Hostels. Suelen compartirse literas o salas comunes con gente en la misma situación que uno. Esto provoca que haya personas más abiertas. Se debe socializar y compartir intereses. Otra buena idea es el Couch Surfing. Puesto que ya tenemos asegurado a un guía coloquial que nos puede llevar por su terreno. Cuando estudié en Cuba, vivíamos 48 personas en el mismo piso. Perdí la cuenta de cuántas aventuras surgieron por ese principio.

Poco capital o capital con ingenio. El dinero en la aventura es un medio para sacarte de problemas. Nuevamente la máxima de la incomodidad. Cuando vemos a los héroes y aventureros del cine y la mitología, rara vez pensamos que gran parte de la aventura es la falta de medios o el sufrimiento mismo. Y nuestra parte racional se potencia cuando sufrimos. Con poco dinero, tienes que ingeniarte la mejor manera de sobrevivir con los recursos que tienes. Recuerdo en Grecia cuando mi amigo Juan Coyoy y yo no teníamos dinero ni para comer (véase la entrada “El Fin del Tiempo” para saber la historia completa). Hasta tuvimos que acudir al robo en ciertas ocasiones por el hambre. Por otra parte, está la aventura Barney Stinson; personaje de la serie How I Met Your Mother. Si dispones de mucho dinero, tienes la libertad de hacer lo que quieras. Pero, para que sea una aventura, debe acompañarse de algún toque de surrealismo. Retos surreales para ser más concretos. Ir a bares poco usuales, tomar un transporte espontáneo a tierras desconocidas, ponerse disfraces, invitar a personajes extraños y hacer cualquier cosa poco común que te venga a la mente. O en palabras de Barney Stinson, “Desafío Aceptado”. Mi amigo Alberto García contrató a un enano y lo disfrazó de cordero para una despedida de soltero. Lo esposó al novio que iba disfrazado de Hannibal Lecter. En Halloween me disfracé de Green Lantern y salí de copas con mi amigo, Alejandro Merino. Acabamos en una fiesta privada con dos periodistas del País y el costurero de la Princesa Leticia. LEGEN- wait for it- DARY!

Personajes misteriosos. Todos los sitios tienen alguno. Sobre todo en los bares. Hay que fijarse y buscarlos. Generalmente están solos o llaman la atención con su personalidad particular y única. Es bueno hablar con esta gente y no juzgar sus apariencias. Incluso si se trata de alguien callejero o de la mala vida. Hay que mantenerse alerta igualmente ya que hay varias sabandijas que se te pegan sin contribuir nada a la aventura. Una vez conocí a un hombre mayor que era todo un personaje. Nos invitó a su casa a mí y a otras amigas. Al final fui yo quien rechazó su oferta por un cambio de humor agresivo que tuvo repentinamente. Sigo creyendo que era un asesino en serie hasta hoy en día. En el otro costado, mi amigo Jaime Meré y yo dimos con un personaje que nos esculpió en lo propio bar (véase la entrada “El Escultor de Plastilina” para saber la historia completa). Otra vez, con mi amigo Alejandro Merino nuevamente, conocimos a dos chicos vestidos de pitufos. Nos hicimos amigos de ellos y acabamos siendo el centro de atención en todos los bares que entrábamos. ¡Pues ni siquiera era Carnaval o Halloween!

Mezclar cosas inusuales. Lo que llamo la ley oxímoron. Un término literario que implica la comparación entre dos cosas desemejantes. Situaciones que no encajan. Ir borracho a un museo, atender un bar gótico vestido de blanco, cantar karaoke donde sólo hay gente mayor, vagar por la naturaleza sin algún cometido, visitar culturas distintas, hacer un rave en un monasterio, etc. Mi amigo Alberto García hizo un botellón en los Campos Elíseos de París. Cuando llegó la policía, sólo decía “Spanish Embassy” una y otra vez para salvarse. En mi caso personal, una vez acabé hablando borracho con un cura en un hospital porque mi alero sentía remordimiento por los numerosos pecados acontecidos esa noche.

Hombres, Mujeres y Viceversa. Detesto titularlo como un programa de Telecinco, pero es el término adecuado para enfocar mi premisa desde ambos bandos. Por un lado, la mujer aventurera es aquella que suele decidir los sitios y tiene voluntad de actuar libremente sin influencia masculina alguna. En este caso, es mejor dejarse llevar. Puesto que las mujeres aventureras siempre conocen a más gente propensa a la aventura con las que se puede interactuar. El hombre aventurero, apoyándome en el propio Casanova, es aquel que siempre tiene una aventura en mente cuando habla con mujeres. Seduce a quien sea con un plan que saca a la gente de sus convenciones. Que, por cierto, es el único plan que hace un aventurero. Varias veces he realizado fiestas temáticas con otros amigos y amigas (gafas, sombreros, disfraces, cócteles especiales, etc.) donde se garantiza algo fuera de la convención y, en consecuencia, una aventura. 

Alcohol, mucho alcohol. Triste pero cierto. Aunque no es indispensable, el alcohol siempre garantiza algún tipo de aventura. Nos desinhibe y nos hace hacer cosas que normalmente nunca haríamos. Nos abre más a la gente y nos conduce a casas de desconocidos. Muchos de ellos personajes surreales que están borrachos también. Además, mientras más bebes, más indiferente te vuelves a todo. Como cuando me fui a Pamplona con mis amigo, Jorge García. Estoy seguro que sin el alcohol no hubiera estado en un encierro de San Fermín ni pude haber dormido en la calle.

Road Trip. El viaje en cualquier tipo de transporte siempre es una aventura. Sobre todo cuando se cuenta con vehículo propio y amigos de confianza. Mientras más largo es el viaje, mejor la aventura. Es buena idea parar en sitios en el camino y no conducir sin parar hasta el destino final. Recuerdo un viaje a Monterrico con mis amigos guatemaltecos, Hugo Pinelo, Ana Regina Palomo, Samuel Saito y Lluvia Guerra. Llevábamos una cinta cassette con la canción “Red Red Wine” de UB40. Surgió la idea crápula de bebernos una botella de vino tinto entre todos antes de acabar la canción. La repetimos al menos cuatro veces. Y se acabaron las botellas de vino (también creo que eran cuatro). La borrachera aparte, ya teníamos una aventura en el comienzo del viaje. 

Simbolismos. El tema de mi blog y las anacrónicas. Cuando te ingenias algún simbolismo sobre tu viaje o tu experiencia, todo lo que sucede es mágico. No hay mejor aventura que la que tienes en tu mente. Una que sólo tú puedes ver y te da el mayor sentido sobre todo lo existente. Recuerdo el viaje con mi padre a Normandía. Fuimos a la casa de Monet. Entre ésta y el estanque famoso de los lirios, había sol y lluvia. Y no eran más que unos metros por el acceso subterráneo. Luego estábamos un poco borrachos y apareció un gato negro. Tanto mi padre como yo somos supersticiosos con el tema. El gato nos vió un momento y luego empezó a cruzarnos el paso. Nosotros nos adelantamos como por instinto a la misma vez diciendo, "No, no, no, no, no". Y ese suceso tan sencillo realmente refleja el viaje completo. Pues por correr más rápido que la suerte, tuve el mejor viaje padre-hijo de toda mi vida. 

Ser o no ser. Quizá la más importante. Normalmente, estamos constituidos como animales temerosos. Nos habituamos a una rutina y no queremos salir de ella. Es muy importante ser uno mismo. Pero para la aventura, la mayor parte de las veces hay que dejarse llevar por situaciones que no son de nuestro agrado o preferencia. Arriesgar estar en peligro, entrar a situaciones desconocidas, acceder a sitios a los que jamás entraríamos y estar en compañía de personajes misteriosos con los que no hablaríamos normalmente. Nunca me gustaron los afters, pero he acabado con mil historias yendo a ellos. Lo dicho, cualquier aventura es la innovación sobre una carencia. Y no hay mejor cura para la carencia que romper los límites de la realidad.

Enlaces:

Giacomo Casanova Wiki: http://es.wikipedia.org/wiki/Giacomo_Casanova
Indiana Jones Wiki: http://es.wikipedia.org/wiki/Indiana_Jones
Frases sobre la aventura: http://www.frasesypensamientos.com.ar/frases-de-aventura.html

viernes, 7 de septiembre de 2012

EL SECRETO DE DIONISO: LAS MEJORES CURAS PARA LA RESACA


Mientras que siempre fue mi sueño ser recordado como un gran escritor, es inevitable que sea recordado por muchos como un gran borracho. No puedo borrar esta parte de mí. Ni lo deseo. Me basta que sea considerado un “buen” borracho. ¿Qué mejor manera de demostrarlo que con mi conocimiento sobre los efectos del siguiente día? La Cura para la resaca. Para los críticos, mantengo la línea del blog. Sobre todo porque creo que Dioniso, dios griego del vino, me contó el secreto durante alguno de mis delirios. 

Se le llama por varios nombres según cada país. Resaca, goma, cruda, guayabo, ratón, suape, chaqui, chuchaqui, hangover, etc. Se caracteriza por cansancio, dolor de cabeza, deshidratación, malestares gastrointestinales y, en peores casos, delirium tremens y la incapacidad para elegir películas fuera del género Pixar/Disney. Pese a que hay una gran parte de mitos y supuestas curas de la resaca, me voy a adherir a mis propias experiencias y lo que me ha resultado útil de las mismas. Como borracho crónico, he tenido miles de resacas, me he documentado sobre el tema y he probado numerosos métodos. No como muchos que dicen que la resaca es sólo deshidratación y descanso. Estoy seguro que esa gente nunca ha tenido resacas de verdad. Y por desgracia, amigos lectores, yo las he vivido en toda su gama. De ahí mi ventaja. ¡El secreto dionisíaco!    



Curas preventivas. Hay muchos mitos que dicen que la ingesta de agua, leche, aceite, carbón activado u otros protectores estomacales como son los inhibidores de la bomba de protones ayudan a prevenir la resaca si se consumen antes de la borrachera. Quiero dejar claro este punto para los siguientes: No hay cura verdadera para la resaca; tan sólo se pueden moderar los efectos y aceleran el proceso metabólico del organismo. Por mucho que busqué la cura infalible, me percaté que el metabolismo del alcohol debe pasar de una manera u otra. Por lo que sólo se puede acortar la resaca; no curarla en sí misma.

En el caso de las curas preventivas, sólo la primera tiene cierta efectividad salvo que te quita la borrachera y te hace orinar con mayor frecuencia. Y marcar territorio sin transformarme en un animal no tiene ningún sentido para mí. Los inhibidores y los protectores estomacales sencillamente contribuyen a mantener el estómago intacto para la absorción de vitaminas el día siguiente; pero no previene la resaca propiamente. 

Por motivo estético del paladar, recomiendo hacer un sándwich de atún con mayonesa o comer boquerones en vinagre antes de dormir. Un sabor potenciado como ninguno. Aunque no cambiará mucho por la mañana. Puesto que comer y beber deben darse en las mismas proporciones para amortiguar la resaca. En cuanto a comer, es lógico que cenar previo a consumir alcohol siempre será mejor que beber con un estómago vacío. Recomiendo las comidas grasientas como el pollo frito ya que ralentiza el efecto del alcohol en el cuerpo. También que la bebida con la que mezcles el alcohol o el alcohol mismo no lleve azúcar para que no potencie la resaca el día siguiente con niveles exagerados de glucosa en sangre (ejemplo: Coca Cola Light o Coca Cola Zero en lugar de Coca Cola normal para tu copa, trago y/o pelotazo). Cosa que no te exime de tener una resaca terrible si bebes demasiado.  

Lo que no hay que hacer. Siguiendo la linea de las curas preventivas, diría que es tan importante lo que hacemos como lo que no hacemos. Está claro que no podemos mezclar bebidas. Pero también tengo que entrar más detalle en este tema. De mi experiencia, me he dado cuenta que si acabamos mezclando, lo mejor es seguirlo haciendo una vez comenzamos. Es decir, cada copa que bebamos debe ser distinta. Porque lo que realmente da las peores resacas no es la mezcla en sí sino mezclar en  cantidades desporporcionas. Beberme 5 cervezas,  4 gin tonics, 3 cuba libres, 4 bourbon naranjas, etc. Pero si bebemos una cerveza, un gin tonic, un cuba libre, un bourbon naranja y cambiando así hasta el final, la resaca no será tan mala. Reitero, no por la cantidad, sino por la proporción de la mezcla. Para los fumadores, no recomiendo fumar durante la resaca. No sólo porque despierta dolores recónditos, sino porque nos quita las vitaminas que consumimos para quitarnos la resaca en primer lugar. Con lo cual todo esfuerzo que hayamos hecho para curarnos, se perdería. Hay gente que hace deporte de resaca. Tampoco lo recomiendo. Mientras que el sudor viene bien para aliviar la resaca, no hay que olvidar que el órgano más perjudicado en la resaca es el hígado. Y haciendo deporte, lo único que hacemos es hacerlo trabajar incluso más duro. Aunque el ejercicio pruebe efectivo para acelerar el metabolismo, es más saludable hacerlo a través de alimentos. Y en cuanto al sudor, recomiendo más a ir a un sauna donde no estamos poniendo en riesgo nuestro organismo. El descanso es una regla de oro en la resaca.

Evadiría tomar azúcar en general salvo la miel (que, aparte de energía para el cuerpo posee un balance de sodio y fructosa para regular el nivel de azúcar en sangre) jugos o zumos de frutas (la sandía funciona especialmente bien en este apartado ya que hidrata y sirve de diurético a la vez) y el chocolate negro (por el contenido nutricional que contribuye en el metabolismo del alcohol). La razón primordial por evadir lo dulce es porque, mientras que el alcohol aumenta el nivel de azúcar en sangre, el páncreas suele regularlo con insulina. Y dependiendo de la persona y el funcionamiento particular de su páncreas, puede tener azúcar alta o baja en la resaca. Con lo cual, es más seguro regular el nivel de azúcar en sangre condimentando los alimentos con ajo, cebolla, ginseng o alfalfa.  O incluso mejor, durmiendo ayudamos al organismo a regular el azúcar de manera natural. Tomarla durante la resaca  puede calmar los síntomas, pero sólo es de manera temporal. Como un pico que sube y luego baja para acabar peor. El azúcar sirve como mecanismo para calmar los antojos o el "mono" alcohólico. Es el motivo por el cual en Alcohólicos Anóminos ofrecen muchos caramelos. Quizá es algo efectivo para esto, pero no para la resaca a largo plazo. El potasio y alimentos que contengan el mismo deben consumirse en pocas cantidades ya que contradicen el sodio de nuestro cuerpo (explicado en el siguiente apartado); ídem, a mayor potasio, menor sodio y viceversa. Mientras que el potasio ayuda a hidratarnos vía los electrolitos y es más saludable, en la resaca, el sodio lo hará mejor además de ser algo que el cuerpo literalmente necesita en ese momento. En caso de comer alimentos ricos en potasio tipo batata, aguacate, calabaza o plátanos, debemos asegurarnos de compensar con mucho sodio o hacerlo más adelante en la resaca cuando ya estamos más hidratados.

Agua y sal. Al beber, la célula excreta agua y sal para darle espacio al alcohol. El consumo de sodio retiene agua. Ergo por qué estamos deshidratados con antojo salado al día siguiente. Aunque la resaca sea en parte deshidratación, quitársela con agua tarda mucho más en metabolizarse. Es recomendable siempre acompañar el agua con sal para que el proceso no se demore demasiado. Aclaro aquí que el mito que la sal te da más sed no se debe concretamente a la deshidratación sino, más bien, a que está pidiendo su otra mitad. Por ello cada ingesta de agua, debe acompañarse con la misma proporción de sal. Meterse al mar es una opción cuando no tienes dinero. Pero es más higiénico tomar caldos, sopas y consomé. Preferiblemente, que no sean de sobres y se preparen de manera natural para absorber mejor los nutrientes. Aclaro que, aunque de manera preventiva, la grasa tiene un efecto efectivo para ralentizar los efectos, durante la resaca la comida grasienta que tanto nos apetece no tiene correlación salvo por este motivo. Es decir, nos apatecen platos más grasientos sencillamente porque son los que más sodio contienen. Y nada más.

Como opción más saludable, mi mejor recomendación es la sopa de brócoli. Se hierve poco tiempo y se licúa con un poco de agua de la cocción. Se le agrega un poco de mantequilla, sal y crema o nata. El brócoli es una buena fuente de Vitamina C y colabora en la activación del hígado. Para aquellos que tengan más pereza, recomiendo un litro de agua acompañado de pepinillos, anchoas o quesitos tipo La vaca que ríe. Incluso durante el consumo de alcohol y antes de dormir. 

Zumos o Jugos preparados. Mejor que beber agua. Como en el caso de las sopas y los caldos, es mejor que no sean zumos preparados por el mercado industrial. La razón se debe a que el contenido de estos zumos o jugos suele ser bajo y la absorción de los mismos es básicamente nula. Al beber, se pierde Vitamina C y Vitaminas del Complejo B que son fundamentales para el metabolismo del alcohol (específicamente, la B1, la B3, la B6 y la B12; ídem, tiamina, niacina, piridoxina y cobalamina). Ya que estamos, el mito caído que no funciona consumir vitaminas lo vuelvo a mitificar diciendo que sí funciona sencillamente porque mi umbral de dolor disminuye siempre que lo hago. Es como darle a nuestro cuerpo las armas para deshacerse del alcohol; sólo bebiendo agua sería como ir a la Segunda Guerra Mundial armado con un alfiler; con las vitaminas, sería el Capitán América. Lo mejor es hacer las bebidas en una batidora y mezclar frutas o verduras altas en la vitamina en cuestión. Es muy importante que cualquier batido que hagamos lo consumamos en el momento y de golpe puesto que al licuar las frutas estamos rompiendo la membrana celular de los nutrientes y perdiendo la integridad de los mismos. 

Fuentes de Vitamina C en orden de mayor a menor incluyen la ciruela kakadu, el camu camu, la acerola, el escaramujo o bulbo de rosa, el baobab, la guayaba, la grosella negra, el kale, el pimiento rojo, el perejil, el kiwi, el brócoli, los coles de bruselas, la papaya, la fresa, la naranja, el limón, la coliflor, el melón, el pomelo, la frambuesa, la mandarina, las espinacas, la lima, el mango, el cilantro y el tomate. En ocasiones suelo usar agua de coco natural en lugar de agua o leche para los batidos de frutas. El agua de coco contiene potasio que, en torno, aporta electrolitos e hidrata con mayor efectividad. Además contiene Vitaminas del Complejo B. El consumo de potasio siempre viene mejor en la última fase cuando ya nos hemos hidratado y la sal ya no resulta tan indispensable. Más que una fruta o verdura con un alto porcentaje, es mejor mezclar varias fuentes de alto porcentaje en de la misma vitamina o más en una sola bebida. De esta manera, no sólo se garantiza la absorción de la vitamina en alguna de las fuentes, sino que da la posibilidad de recibir diferentes usos de la misma vitamina en el organismo. La absorción de vitaminas siempre se da por porcentajes y consumir demasiada es a veces igual que consumir poca. En mayores porcentajes, sencillamente aceleramos el proceso. Puesto que, en otros casos, la fuente tiene un efecto más retardado e ineficaz. Con lo cual, debemos concentrarnos en un sólo golpe intenso de todo en cuanto mezcla y porcentaje de fuentes ya que repetirlo más adelante no servirá de nada y tomándolo poco a poco sería igual que quitarnos la resaca lentamente con agua. 

Posteriormente a eso, se requiere un proceso de hidratación constante combinado con alimentos salados. Un buen ejemplo de un batido combinado es el Gazpacho. Preferiblemente sin pepino con pimiento rojo, tomates, limón y un diente de ajo (un inciso para evitar futuras críticas; sé que es una sopa, sé que no lleva limón y sé que suele hacerse con pimiento verde; el pimiento rojo y el limón son por la Vitamina C). En el caso del Complejo B, se pueden encontrar estas vitaminas en fuentes como los cereales, los huevos, el pescado, la carne y el marisco (especialmente las almejas y las ostras). No recomiendo hacer batidos para esto.

Bebidas comerciales. Aunque siempre son preferibles las naturales, hay algunas bebidas del mercado muy eficaces. Las bebidas isotónicas como Gatorade, Powerade y Aquarius son mejores que el agua ya que, aparte de combatir la deshidratación, restauran los electrolitos y reducen el dolor de cabeza relacionado al mismo. Entre los zumos o jugos, el mejor es el Sunny Delight. Aparte de tener un alto contenido en Vitamina C, tiene también la vitamina B6. Es la bebida que siempre tengo a mi vera cuando tengo demasiada pereza para hacerme un batido. Y mis resacas suelen ser muy perezosas (ya que estamos, es muy importante descansar mucho para cualquier tipo de resaca; en esta dimensión, estar despierto equivale a deshidratación y tener sueño a estar hidratado). Los jugos V8 o zumos compuestos de varios vegetales también son una buena opción. Y para los que beben café en la resaca, recomiendo más las bebidas energéticas ya que aportan una gran cantidad de Vitaminas del Complejo B. Siempre hay que ver los valores nutricionales detrás para beber aquellas con mayores porcentajes y no beberlas en gran cantidad (puesto que la cafeína también deshidrata). En España, las mejor de todas es de la marca Monster por ser de las pocas en llevar porcentajes mayores del cien por ciento de las vitaminas necesarias. Previamente era la marca No Fear Motherload que además contenía Vitamina C. Aunque llevo tiempo de no verla. En cualquier caso, un Red Bull u otra bebida energética también ayudan. Pero de tener la opción, elige siempre Monster (cualquier variedad tiene porcentajes altos).

Ceviche. Originario de Perú, la cultura de las resacas y las cevicherías sigue perdurando en gran parte de América. El ceviche guatemalteco en concreto lleva muchos de los ingredientes necesarios para curar la resaca: tomate (elimina toxinas), perejil o cilantro y lima o limón (Vitamina C), cebolla (favorece el hígado y el páncreas y tiene un alto contenido mineral que ayuda en la digestión) y pescado (Vitaminas del Complejo B). Esto último debe comprarse siempre fresco en la pescaderías y no debe estar congelado o prefabricado en bolsas o botes de conserva. Para quien no sepa la receta, se marina el pescado en zumo de lima o limón y se deja en la refrigeradora o nevera. Se debe controlar que no quede demasiado crudo o que no se marine demasiado. En esto, hago énfasis en lo segundo. Muchos ceviches se estropean por dejarlos marinando mucho tiempo. He descubierto que el tiempo ideal son 20 minutos; siempre vigilando; hasta que el pescado esté blanco y el zumo del limón está lechoso (la aclamada Leche de Tigre que también recomiendo beber).

Los mejores pescados para hacer ceviche son la corvina, la merluza, la perca y el mero auqnue lo he hecho con otros como atún, salmón, emperador e incluso tintorera. También pueden utilizarse langostinos y camarones precocidos u otro marisco (no hace falta marinar en el caso de los primeros). Se pica tomate, cebolla y cilantro y se junta luego con el pescado marinado y el limón (esto último puede tirarse o mezclarse con zumo de tomate para no seguir cociendo el pescado). Se deja otra media hora en frío para que los sabores se mezclen bien con una cucharadita de consomé. En ocasiones, también he mezclado zumo de más frutas cítricas (naranja, limón, lima y pomelo), hierbabuena (para mejorar el sistema digestivo), perejil y pimiento rojo (para aumentar el porcentaje de Vitamina C ingerido). También es buena idea batir todos los ingredientes secundarios dejando sólo el marisco en sólido.  

Sushi, Sashimi, Steak Tartar y Huevos. Más allá del ceviche, hay un mundo más crudo. Que por muy desagradable que sea para la mayoría, beneficia por la cantidad nutricional que se mantiene al máximo y no pierde sus propiedades durante la cocción. En los tres casos, se trata de una ingesta alta de las Vitaminas del Complejo B. Para el sushi, es mejor ir a un restaurante japonés en lugar de comprarlo ya preparado. Aunque recomiendo más el sashimi por tratarse del pescado crudo mismo. Sale más barato y lo puede hacer uno solo (es imposible hacer sushi de resaca; créanme). El salmón, la caballa y el atún son las fuentes de pescados con mayor contenido de Vitaminas B6 y B12. En el caso del Steak Tartar, se trata de un plato típico francés. Carne molida o triturada de vaca condimentada con varios ingredientes. Primero el aceite de oliva y el limón. Luego mostaza francesa y ketchup. Para los guatemaltecos, es bueno echarle Salsa Chicharronera verde para darle más sabor. Hay gente que le echa alcaparras y cebolla. Pero no es indispensable. Por último, un chorrito de salsa inglesa o salsa Perrins y la yema de un huevo crudo. Debe mezclarse en todo momento para que la carne lo absorba todo. 

En cuanto al último ingrediente del Steak Tartar, también hay un método menos convencional y un poco asqueroso al oído que consiste en meter huevos crudos en un vaso y bebérselos de un trago. Lo que llamo la Resaca Rocky. Los huevos (especialmente crudos) son una buena fuente del amino ácido cisteína; el cual regula el metabolito alcohólico, acetaldehído. En mi experiencia personal, es mejor mezclarlos con sal y un chorrito de salsa inglesa o Perrins igualmente. Hay que asegurarnos de comprar huevos de alta calidad con tal de reducir cualquier posible contagio por Salmonela. Para los menos valientes, se puede hacer una mezcla de ambas en un caldo de huevos. Donde sencillamente metemos un huevo crudo en el caldo que preparamos (preferiblemente de gallina) mezclado con cebolla, tomate, apazote, apio y cilantro. Con esto también estamos contribuyendo a que nuestro organismo recupere agua y sal.

Las tres Ps de la resaca. La Pizza es una opción buena por combinar varias comidas en una sola y absorber el alcohol mediante el pan. Los ingredientes dependen del tipo de resaca que se tiene. Una más dócil, se beneficia con ingredientes grasientos como embutidos y/o fiambres (peperoni, jamón, carne picada, bacon y/o tocino, etc) mientras que una más extrema sería más beneficiosa con vegetales (tipo pimientos, champiñones, aceitunas, alcachofas, etc) con tal de no perjudicar el hígado. Para las siguientes Ps, hago hincapié que la resaca tiene una dimensión psicológica además de física; una especie de evolución mental hacia la salud. En lugar de hacer ejercicio, que reitero y no recomiendo en absoluto (puesto que la resaca, como la fatiga del deportista, se cura con descanso y reposición de nutrientes), es mejor ver a otros hacerlo. Las Películas y los videojuegos son una buena manera de regenerar nuestras facultades racionales superiores. No aconsejo películas o juegos demasiado intensos. Es decir nada de David Lynch o GTA. Hago una única excepción deportiva en la tercera P de la resaca: el Porno. No tengo evidencia científica para respaldar mi hipótesis, pero el sexo, sea con pareja o "individual", mejora la resaca. Mi única teoría al respecto es su doble función psicológica y física. La primera no hace falta explicarla pero la segunda intuyo que tiene algo que ver con el aceleramiento del metabolismo. También he encontrado que quedar con la misma gente que saliste la noche anterior hace de efecto placebo y algunas veces disminuye los efectos de la resaca. Especialmente si se trata de una pareja sexual.      

Suplementos vitamínicos y aspirinas. Pasé una fase tomando pastillas de todo tipo de vitaminas, regeneradores del hígado y protectores estomacales. No suele funcionar ningún método salvo como añadido a uno de los métodos anteriores (por algo se llaman suplementos). Y sencillamente pospone los efectos en lugar de acelerarlos. El mejor de todos es Berocca Plus por contener altos porcentajes de Vitamina C y de Complejo B. En el caso de las aspirinas, el ibuprofeno es mejor que el acetaminofén y/o paracetamol por ser menos dañino para el hígado y el sistema digestivo. Además que el ibuprofeno es primordialmente un anti-inflamatorio y el dolor de cabeza de la resaca tiene mucho que ver con la inflamación del propio cerebro. Si se va a tomar, es preferible el Espidifen ya que contiene arginina y facilita la absorción. Por ello, es buena idea mezclar Espidifen con cualquier consumo vitamínico. Sea natural o en pastilla.

Activación del hígado, el páncreas y el sistema digestivo. Antes de probar cualquiera de los métodos citados, uno debe preguntarse el tipo de resaca que se experimenta. A menudo el hígado, el páncreas y el intestino están demasiado dañados. Con lo cual, no se va a metabolizar, regular o absorber nada. Para quien no lo sepa, la prueba biológica de esto es la náusea, el cansancio, la pérdida de apetito y la diarrea. En estos casos, lo primero es reparar estos órganos y evadir la Vitamina C y las aspirinas. Ya que sólo compromete más la digestión. 

Para el hígado y el páncreas, alcachofas, espárragos o bien cualquier fuente alta en beta-caroteno como la zanahoria y la remolacha acompañado de algún suplemento del Complejo B. Para el sistema digestivo, hay que hacerlo en dos fases. Primero bicarbonato (Alka Seltzer y Sal Andrews igualmente; también medicamentos de otra composición química como Almax en España; y el mejor protector estomacal de todos son los genéricos Lansoprazol y Omeprazol), una manzana, té de manzanilla, una pera, piña o productos lácteos para regular el estómago. En esto hago hincapié en los últimos dos. Los productos lácteos en general (principalmente el yogurt bífidus) cubren el estómago con una capa que ayuda al sistema digestivo. Recomiendo que sean desnatados o semi-desnatados para facilitar la digestión y tomarlos antes de la borrachera y durante la resaca; no es buena idea beberlos en estado de ebriedad ya que incita a náuseas y vómitos (a mí nunca me ha pasado pero es lo que oigo). Tampoco hay que abusar de ellos ya que contienen potasio y, como dije, al principio es máqs importante la sal. En cuanto a la piña, aparte de tener propiedades inflamatorias para el cuerpo en general, genera la enzima llamada bromelina que ayuda en la digestión sintentizando mejor las proteínas y, por tanto, la absorción de nutrientes necesarios para curarnos en general (no sólo el estómago).

En el caso del intestino, lo mejor es consumir arroz blanco (ya que los plátanos pueden bajarnos mucho el sodio). Si la diarrea es muy intensa, es mejor sustituir la leche por yogurt (también con moderación); la primera (incluso semi-desnatada) puede comprometer más el intestino mientras que lo segundo contiene menos lactosa. Como medicamentos, el carbon activo/activado o el Pepto Bismol (también útil para la fase estomacal). Luego vamos introduciendo la Vitamina C poco a poco con una fuente moderada tipo el tomate. Igual aconsejo para las resacas más livianas que haya una mezcla proporcional entre la fruta de la Vitamina C con frutas que ayuden a la digestión. Por ejemplo, batido de leche (proteínas para absorber mejor los nutrientes) con  fresas (Vitamina C e hígado), papaya (Vitamina C y estómago), kiwi (Vitamina C y páncreas), piña (mejoramiento digestivo de la absorción protéica) y, por el potasio, medio plátano (intestino). El apio también es un buen diurético para iniciar el proceso metabólico del agua y el alcohol. Aunque debe tomarse con moderación para no aumentar la deshidratación. En este proceso, siempre hay que beber mucha agua isotónica. Y en su defecto, agua mineral con gas o sin gas.

Delirium Tremens. He agregado este apartado recientemente para la resaca más pro. La más difícil de todas que, aparte del párrafo anterior, le acompañan alucinaciones y constantes vómitos. Esto suele pasar cuando se bebe durante mucho tiempo sin comer. O sea que, primer consejo preventivo, es siempre acompañar la bebida con comida; o intentar comer (incluso borracho) en algún punto. De lo contrario, podrás acabar en la dimensión delirium tremens. Admito haber estado en el Infierno de los alcóholicos unas cuantas veces. En ocasiones, también tiene que ver con la calidad del licor que se bebe. A mí sólo me ha pasado con ron blanco. El delirio mismo se caracteriza por un período de sueño y realidad donde realmente no sabes lo que es verdad. Puesto que se alternan entre sí y los sueños que tienes son demasiado reales. Normalmente con la gente con la que habías salido o aquella en tu entorno presente. Puedes incluso soñar que estás durmiendo en tu misma posición o imaginar gente que no está y nunca estuvo contigo; una especie de desdoblamiento.

Lo recomendable en estos casos es el suero o bebidas isotónicas vitaminadas para empezar. Lo primero puedes conseguirlo en cualquier farmacia. Lo segundo se encuentra en el VIPS para los españoles (el agua isotónica llamada Very Well), en tiendas de fitness o bien se puede improvisar mezclando agua isotónica con un suplemento vitamínico. Es importante recalcar que en esta fase, las vitaminas que más nos importan son las del Complejo B. Concretamente la B12 (FYI, es la vitamina que le ponen a la gente con coma etílico). Valga la redundancia, hay que apartarse de Vitamina C para no comprometer más el estómago. Además del suero, tomamos yogurt líquido para beber tipo Danone con la intención de detener los vómitos. Recomiendo también tomar inhibidores de la bomba de protones como Omeprazol y Lansoprasol. Puesto que si no mantienes nada en el estómago, los delirios seguirán su curso.

Una vez conseguimos esto, hay que intentar comer. Lo mejor de experiencia personal son tostadas y té de manzanilla. El té verde seguiría para acelerar el metabolismo y la absorción de vitaminas (este té es útil para cualquier tipo de resaca). Para el delirium tremens en esta fase, incluso recomiendo el Moster Rehab de té verde. La cafeína puede comprometer el estómago a nivel de diarrea, pero acelerará el cerebro para detener los delirios con un 500% de vitamina B12. Cuando vayamos mejorando, incorporamos técnicas del párrafo anterior.  No deseo esta resaca para nadie. Y, quien la experimente, ¡espero sinceramente haber servido de ayuda!
 

El Duende. Como las mujeres embarazadas tienen antojos concretos que deben saciar a toda costa, la resaca también suele pedirnos alimentos muy particulares. Algo que recientemente y en honor al flamenco he llegado a llamar “El Duende”. Cada resaca es distinta como cada persona metaboliza el alcohol de diferentes maneras. Hay que saber escuchar a nuestro Duende y darle todo lo que nos pide. Por muy extraño que sea el antojo. Yo he llegado hasta el Aeropuerto de Barajas sólo para comerme un McMuffin de McDonald's (cuando no los había en el Centro) y recorrerme todas las fruterías de Madrid buscando acerolas. Por desgracia, mi Duende siempre me manda en odiseas gastronómicas…   
 
 
La más obvia. Seguir bebiendo alcohol. Conocido en países anglosajones como hair of the dog. La Teoría García que personalmente nombro después de dos amigos míos con el mismo apellido en cuestión, Alberto y Jorge. El primero le llama “Regular el pH” y el segundo me dijo una vez, “No te quitas la resaca; te pones borracho otra vez”. Aunque no hay que tomarse este método a la ligera. Aparte de aumentar el chance del alcoholismo, puede aparecer una resaca peor. Pero, como todo en la vida, también tiene su arte. 

La mejor manera es acompañar el licor del siguiente día con algún suplemento vitamínico. Un ceviche y una cerveza, una bebida alcohólica mezclada con un zumo preparado, etc. En esto último, hago hincapié en el Bloody Mary y la Michelada guatemalteca. Llevan básicamente los mismos ingredientes: Zumo o jugo de tomate (omitido para la Michelada mexicana; aunque también hacen una versión con Clamato), sal, pimienta, salsa inglesa o salsa Perrins, limón, una rama de apio (Bloody Mary sólo), jugo Maggi (Michelada sólo), vodka (Bloody Mary sólo) y cerveza (Michelada sólo). En el caso de la cerveza, debo agregar que la propia cebada contiene altos niveles de vitaminas del Complejo B. Otro método efectivo es agregale un huevo crudo a la Michelada. El llamado Ojo Rojo popularizado en la película Cocktail de Tom Cruise. 

En cuanto a la ingesta de alcohol sin más, siempre debe beberse en menor proporción que la noche anterior. Sobrepasarse implicaría una resaca multiplicada. El truco es parar en cuanto desaparecen los síntomas. Un poco antes de la euforia para no acabar tirado en un vertedero en peores condiciones. Se debe optar por licores blancos como la ginebra y el vodka o licores de alta calidad. Esto es debido a que son más fáciles de metabolizar por el organismo. Hay que procurar no mezclar el segundo día y, si es posible, beber lo mismo que el día anterior (siempre y cuando no sea un licor barato de supermercado). Otro método rápido con alcohol es el de chupitos o shots de licor puro. Cura la resaca inmediatamente. Aunque también aumenta la posibilidad de volver a ponerse borracho. Si se te pasa la mano, vuelve al comienzo de la página.